Hay en Granada un tipo de
grafiteros con mucho arte que se dedican como los buenos artistas a observar su materia prima (los soportes a pintar) y analizarlos
detenídamente antes de sacar sus
sprays para plasmar sus ideas. No llaman la atención por la calidad de sus pinturas sino por su originalidad al adaptarse al medio urbano. Hay otros impresionantes que merecerían elogios por los puristas del lienzo y que merecen mi admiración. Hay que tener en cuenta que por ejemplo el famoso Miguel
Ángel fue
también una especie de
grafitero legal de su época. Si no que se lo digan a la capilla
sixtina.
Pero hoy os voy a mostrar algunos ejemplos que he encontrado por casualidad del primer tipo de graffitys.
Una jirafa un poco rara
Una linda morita
¿Un cortijo y unos ciclistas?
No, una entrada a una casa y la espalda de la caseta de contadores
3 comentarios:
Joder, como te lo curras.
¡Están guapísimos!
tambien es arte darse cuenta de los grafitis...
enhorabuena
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